Puerta de la Soledad |
Poesía |
ciertas noches debajo de las plantas que rodean mi casa y no dejan apenas respirar siento que hay algunos no algunos muchos animalillos insectos oscuros de bocas incesantes que se van acercando trepan por las paredes encaladas suben a las ventanas atraviesan por minúsculos orificios su madera antigua llegan hasta mi lecho donde sueño entre espasmos allí se quedan fijos observando a ese ser aislado del mundo que no es como ellos solidario de sus semejantes sus antenas quitinosas se remueven inquietas porque sus neuronas incipientes me encuentran ajeno no de su mundo no de este mundo un viviente que existe solitario y su marea plural se retira confusa vuelven al calor de las madrigueras donde toman su fuerza de la presencia múltiple de todos los de su misma especie.
(1983; en Las trece Puertas del Silencio, 1984) |